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domingo, 17 de marzo de 2013

San José, Patrono de la Iglesia Universal

Pongo a San José en este blog,  para que el que entre en él,  pueda preparar la fiesta de este gran santo  y la celebre:
( SAN JOSÉ.)
Franja.
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ESPOSO DE MARÍA Y A QUIÉN
JESÚS LLAMABA "PADRE"
S. José, PATRONO DE LA IGLESIA UNIVERSAL
Modelo de padre y esposo, Patrón de la Iglesia Universal,  de los trabajadores,  de infinidad de comunidades religiosas  y de la buena muerte. A San José Dios le encomendó  la inmensa responsabilidad  y privilegio de ser esposo de la Virgen María  y custodio de la Sagrada Familia. Es por eso el santo que más cerca esta  de Jesús y de la Stma. Virgen María. Nuestro Señor fue llamado  "hijo de José"(Juan 1:45; 6:42; Lucas 4:22)  el carpintero (Mateo 12:55)
No era padre natural de Jesús (quién fue engendrado en el vientre virginal de la Stma. Virgen María por obra del Espíritu Santo y es Hijo de Dios), pero José lo adoptó y Jesús se sometió a el como un buen hijo ante su padre. ¡Cuánto influenció José en el desarrollo humano del niño Jesús! ¡Qué perfecta unión existió en su ejemplar matrimonio con María!
San José es llamado el "Santo del silencio" No conocemos palabras expresadas por él, tan solo conocemos sus obras, sus actos de fe, amor y de protección como padre responsable del bienestar de su amadísima esposa y de su excepcional Hijo. José fue "santo" desde antes de los desposorios. Un "escogido" de Dios. Desde el principio recibió la gracia de discernir los mandatos del Señor.
Las principales fuentes de información sobre la vida de San José son los primeros capítulos del evangelio de Mateo y de Lucas. Son al mismo tiempo las únicas fuentes seguras por ser parte de la Revelación.
San Mateo (1:16) llama a San José el hijo de Jacob; según San Lucas (3:23), su padre era Heli.  Probablemente nació en Belén, la ciudad de David del que era descendiente. Pero al comienzo de la historia de los Evangelios (poco antes de la Anunciación), San José vivía en Nazaret.
Según San Mateo 13:55 y Marcos 6:3,
 San José era un "tekton". 
La palabra significa en particular que era carpintero. San Justino lo confirma (Dial. cum Tryph., lxxxviii, en P. G., VI, 688), y la tradición ha aceptado esta interpretación.
S. José, El Carpintero
Si el matrimonio de San José con La Stma. Virgen ocurrió antes o después de la Encarnación aun es discutido por los exegetas. La mayoría de los comentadores, siguiendo a Santo Tomás, opinan que en la Anunciación, la Virgen María estaba solo prometida a José. Santo Tomás observa que esta interpretación encaja mejor con los datos bíblicos.
Las barbas, a S. José le hacen parecer mayor.
Los hombres por lo general se casaban muy jóvenes y San José tendría quizás de 18 a 20 años de edad  cuando se desposó con María. Era un joven justo, casto, honesto, humilde carpintero... ejemplo para todos nosotros. 
Desposorios de S. José con Santa María la Virgen
La literatura apócrifa, (especialmente el 
"Evangelio de Santiago", el "Pseudo Mateo" 
y el "Evangelio de la Natividad de la Virgen María", 
"La Historia de San José el Carpintero",
 y la "Vida de la Virgen y la Muerte de San José) 
provee muchos detalles,
 pero estos libros no están dentro del canon
 de las Sagradas Escrituras y no son confiables.
Amor virginal
Algunos libros apócrifos cuentan que San José
 era un viudo de noventa años de edad 
cuando se casó con la Stma. 
Virgen María quien tendría entre 12 a 14 años.
Estas historias 
no tienen validez 
y San Jerónimo las llama "sueños".
Sin embargo han dado pie a muchas representaciones artísticas. La razón de pretender un San José tan mayor quizás responde a la dificultad de una relación virginal entre dos jóvenes esposos. Esta dificultad responde a la naturaleza caída,
 pero se vence con la gracia de Dios. 
Ambos recibieron extraordinarias gracias
 a las que siempre supieron corresponder.
En la relación esposal de San José y la Virgen María tenemos un ejemplo para todo matrimonio.
Nos enseña que el fundamento de la unión conyugal está en la comunión de corazones en el amor divino. 
Para los esposos, la unión de cuerpos debe ser una expresión 
de ese amor y por ende un don de Dios.
San José y María Santísima, sin embargo, 
permanecieron vírgenes
 por razón de su privilegiada misión en relación a Jesús. 
 La virginidad, como donación total a Dios, 
nunca es una carencia;
 abre las puertas para comunicar el amor divino 
en la forma mas pura y sublime.
 Dios habitaba siempre en aquellos corazones puros y ellos compartían entre sí los frutos del amor que recibían de Dios.
Desposorios. Detalle del Retablo de Torreciudad
El matrimonio fue auténtico, 
pero al mismo tiempo, según San Agustín y otros, los esposos tenían la intención de permanecer en el estado virginal. (cf.St. Aug., "De cons. Evang.", II, i in P.L. XXXIV, 1071-72; "Cont. Julian.", V, xii, 45 in P.L.. XLIV, 810; St. Thomas, III:28; III:29:2).
"la Virgen esperaba un hijo"
por obra del Espíritu Santo. (Mat. 1:19-20, 24)
Pronto la fe de San José fue probada 
con el misterioso embarazo de María.
 No conociendo el misterio de la Encarnación y no queriendo exponerla al repudio y su posible condena a lapidación, pensaba retirarse cuando el ángel del Señor se le apareció en sueño: 
"Su marido José, como era justo y no quería ponerla en evidencia, resolvió repudiarla en secreto. Así lo tenía planeado, cuando el Angel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: «José, hijo de David, no temas tomar contigo a María tu mujer porque lo engendrado en ella es del Espíritu Santo. Despertado José del sueño, hizo como el Angel del Señor le había mandado, y tomó consigo a su mujer."(Mat. 1:19-20, 24) .
Unos meses mas tarde, llegó el momento para S. José y  María de partir hacia Belén para empadronarse
 según el decreto de Cesar Augusto.
 Esto vino en muy difícil momento ya que ella estaba en cinta. (cf. Lucas 2:1-7).
Jesucristo nació en Belén
En Belén tuvo que sufrir con La Virgen la carencia de albergue hasta tener que tomar refugio en un establo. Allí nació el hijo de la Virgen. El atendía a los dos como si fuese el verdadero padre. Cual sería su estado de admiración a la llegada de los pastores, los ángeles y mas tarde los magos de Oriente. 
Referente a la Presentación de Jesús en el Templo,
 San Lucas nos dice:
"Su padre y su madre estaban admirados 
de lo que se decía de él".(Lucas 2:33).
Adoración de los Reyes Magos
En Belén tuvo que sufrir con La Después de la visita de los magos de Oriente, Herodes el tirano, lleno de envidia y obsesionado con su poder, quiso matar al niño. San José escuchó el mensaje de Dios transmitido por un ángel:
«Levántate, toma contigo al niño y a su madre y huye a Egipto; y estate allí hasta que yo te diga. Porque Herodes va a buscar al niño para matarle.»
Mateo 2:13.  San José obedeció y tomo responsabilidad por la familia que Dios le había confiado.
San José tuvo que vivir unos años 
con la Virgen y el Niño en el exilio de Egipto. 
Esto representaba dificultades muy grandes: la Sagrada familia, siendo extranjera, no hablaba el idioma, no tenían el apoyo de familiares o amigos, serían víctimas de prejuicios, dificultades para encontrar empleo y la consecuente pobreza. San José aceptó todo eso por amor sin exigir nada.  
Una vez mas por medio del ángel del Señor, supo de la muerte de Herodes: "«Levántate, toma contigo al niño y a su madre, y ponte en camino de la tierra de Israel; pues ya han muerto los que buscaban la vida del niño.»  El se levantó, tomó consigo al niño y a su madre, y entró en tierra de Israel.  Pero al enterarse de que Arquelao reinaba en Judea en lugar de su padre Herodes, tuvo miedo de ir allí; y avisado en sueños, se retiró a la región de Galilea". Mateo 2:22. 
Fue así que la Sagrada Familia regresó a Nazaret. 
Desde entonces el único evento que conocemos relacionado con San José es la "pérdida" de Jesús al regreso de la anual peregrinación a Jerusalén (cf. Lucas 2, 42-51).  San José y la Virgen lo buscaban por tres angustiosos días hasta encontrarlo en el Templo.  Dios quiso que este santo varón nos diera ejemplo de humildad en la vida escondida de su sagrada familia y su taller de carpintería.
En Nazaret, en la carpintería
Lo mas probable es que San José haya muerto antes del comienzo de la vida pública de Jesús ya que no estaba presente en las bodas de Canaá ni se habla mas de él. De estar vivo, San José hubiese estado sin duda al pie de la Cruz con María.
 La entrega que hace Jesús de su Madre a San Juan da también a entender que ya San José estaba muerto.
S. José.
La devoción a San José se fundamenta en que este hombre "justo" fue escogido por Dios para ser el esposo de María Santísima y hacer las veces de padre de Jesús en la tierra.  Durante los primeros siglos de la Iglesia la veneración se dirigía principalmente a los mártires. 
Quizás se veneraba poco a San José para enfatizar
 la paternidad divina de Jesús.
S. José con el Niño Jesús
Pero, así todo, los Padres (San Agustín, San Jerónimo y San Juan Crisóstomo, entre otros), ya nos hablan de San José.  Según San Callistus, esta devoción comenzó en el Oriente donde existe desde el siglo IV, relata también que la gran basílica construida en Belén por Santa Elena había un hermoso oratorio dedicado a nuestro santo.
San Pedro Crisólogo dice de S. José:
"José fue un hombre perfecto, que posee todo género de virtudes" El nombre de José en hebreo significa "el que va en aumento. "Y así se desarrollaba el carácter de José, crecía "de virtud en virtud" hasta llegar a una excelsa santidad.
En el Occidente, referencias a (Nutritor Domini) San José aparecen  en el siglo IX en martirologios locales y en el 1129 aparece en Bologna la primera iglesia a él dedicada.  Algunos santos del siglo XII comenzaron a popularizar la devoción a San José entre ellos se destacaron San Bernardo, Santo Tomás de Aquino, Santa Gertrudiz y Santa Brígida de Suecia. Según Benito XIV (De Serv. Dei beatif., I, iv, n. 11; xx, n. 17), "La opinión general de los conocedores es que 
los Padres del Carmelo fueron los primeros
 en importar del Oriente al Occidente
 la laudable práctica de ofrecerle
 pleno culto a San José".
San Bernardino de Siena  dice:
 "... siendo María la dispensadora de las gracias que Dios concede a los hombres, ¿con cuánta profusión no es de creer que enriqueciese de ella a su esposo San José, a quién tanto amaba, y del que era respectivamente amada? " Y así, José crecía en virtud y en amor para su esposa y su Hijo, a quién cargaba en brazos en los principios, luego enseñó su oficio
 y con quién convivió durante treinta años.
Los franciscanos fueron los primeros en tener la fiesta de los desposorios de La Virgen con San José. Santa Teresa tenía una gran devoción a San José y la afianzó en la reforma carmelita poniéndolo en 1621 como patrono, y en 1689 se les permitió celebrar la fiesta de su Patronato en el tercer domingo de Pascua. Esta fiesta eventualmente se extendió por todo el reino español. La devoción a San José se arraigo entre los obreros durante el siglo XIX.
El crecimiento de popularidad movió a Pío IX, el mismo un gran devoto, a extender a la Iglesia universal la fiesta del Patronato (1847) y en diciembre del 1870 lo declaró Santo Patriarca, patrón de la Iglesia Católica. San Leo XIII y Pío X fueron también devotos de San José. Este últimos aprobó en 1909 una letanía en honor a San José.
Santa Teresa de Jesús  dice:
 "Tomé por abogado y señor al glorioso San José."
 Isabel de la Cruz, monja carmelita, 
comenta sobre Santa Teresa: 
"era particularmente devota de San José 
y he oído decir se le apareció muchas veces
 y andaba a su lado."
"No me acuerdo hasta ahora haberle suplicado cosa que la haya dejado de hacer. Es cosa que espanta las grandes mercedes que me ha hecho Dios por medio de este bienaventurado santo...No he conocido persona que de veras le sea devota que no la vea mas aprovechada en virtud, porque aprovecha en gran manera a las almas que a El se encomiendan...Solo pido por amor de Dios que lo pruebe quien no le creyere y vera por experiencia el gran bien que es encomendarse a este glorioso patriarca y tenerle devoción..." -Sta. Teresa.
En el siglo XV, merecen particular mención como devotos de San José los santos Vicente Ferrer (m. 1419), Pedro d`Ailli (m. 1420), Bernadino de Siena (m. 1444) y Jehan Gerson (m. 1429).  Finalmente, durante el pontificado de Sixto IV (1471 - 84), San José se introdujo en el calendario Romano en el 19 de Marzo. Desde entonces su devoción ha seguido creciendo en popularidad.  En 1621 Gregorio XV la elevó a fiesta de obligación. Benedicto XIII introdujo a San José en la letanía de los santos en 1726.
San Alfonso María de Ligorio nos hace reflexionar: 
"¿Cuánto no es también de creer aumentase la santidad de José el trato familiar que tuvo con Jesucristo en el tiempo
 que vivieron juntos?"
José durante esos treinta años fue el mejor amigo, el compañero de trabajo con quién Jesús conversaba y oraba. José escuchaba las palabras de Vida Eterna de Jesús, observaba su ejemplo de perfecta humildad, de paciencia, y de obediencia, aceptaba siempre la ayuda servicial de Jesús en los quehaceres y responsabilidades diarios. Por todo esto, no podemos dudar que mientras José vivió en la compañía de Jesús, creció tanto en méritos y santificación que aventajó a todos los santos.
Oraciones a San José, 
para pedirle protección.
San José, elegido por Dios para ser en esta tierra
 el casto esposo de María y el padre de Jesús,
 intercede por nosotros que nos dirigimos a ti.
 Tu que fuiste el fiel custodio de la Sagrada Familia,
 bendice y protege a las familias de este mundo.
 Tú, que fuiste maestro de laboriosidad,
 intercede en favor de todos aquellos que trabajan.
 Tú, que tantas veces sufriste en tu vida la prueba,
 ayuda a los que sufren.
San José, patrón de los trabajadores.
(Oración del Papa Juan XXIII)
Oh José, tú que sufriste el peso del cansancio
 y la fatiga para procurar el sustento
 de Jesús y María, protege nuestro trabajo,
 aleja todo peligro; no permitas
 que nos falte el medio de alimentar dignamente
 a la familia. Alivia la angustia de los desempleados
y la ansiedad de los inmigrantes;
 haz que en el respeto de los derechos
 y en la dignidad del trabajo, 
podamos imitar con tu ejemplo en nuestra vida
 los designios ocultos que Dios nos ha reservado.

Bibliografía: Souvay, Charles L., Saint Joseph, Catholic Encyclopedia, Encyclopedia Press, Inc. 1913.
Textos de: www.corazones.org
Encontré esta página en ese
 blog arriba indicado, 
y como no cabía en el mío,
 porque las características del mío 
son más pobres,
lo he tenido que modificar y adaptar 
a mis circunstancias,
adornándolo con muchas imágenes.
Espero que os agrade,
 y que siga haciendo mucho bien. 
 Que San José nos proteja a todos.
Franja.

1 comentario:

LA ISLA DE LOS SENTIMIENTOS dijo...

Te has esmerado, amigo Sacerdote. Como se ve que San José es también el patrón de los Seminarios y Sacerdotes. Pidámosle que igual que cuidó a Jesús, hoy sea padre nuestro adoptivo y cuide de nosotros, de los parados, de los enfermos del mundo en crisis. Qué Dios te bendiga y te de largos años de vida para seguir trabajando por el Reino.

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